Es una pregunta habitual: ¿Cuál es la duración de la terapia online?
Y la respuesta no se hace esperar:
No podemos determinar previamente la terminación de una terapia.
¿Por qué? ¿De qué puede depender que termine?
De lo que cada uno pueda querer...
Habitualmente, hay algún asunto que hace que alguien quiera consultar, que lo lleva a consultar, y el despliegue de ese asunto requiere tiempo. El tratamiento de ese asunto también conlleva un tiempo.
Decimos "tiempo", y alguien que padece cierto grado de ansiedad ya escucha "Mucho tiempo" porque a veces el tiempo se vuelve insoportable, y que no esté predeterminado ya le hace pensar que va a llevar muuuucho tiempo, aunque solo dijimos que requiere tiempo, no dijimos que sea mucho ni poco... es como que alguien con ansiedad pensaría: ¡¡¡tiempo!!! uhh, entonces ¡No!. ¿Cómo se podría desplegar un asunto sin que se diga?, ¿cómo podría tratarse un asunto sin tiempo?
Y en ese tiempo es muy probable que surjan otros asuntos que se pueden querer tratar o no. ¿Y de qué depende?
De lo que cada uno pueda querer...
Pueden tratarse ciertos asuntos y decidir que hasta ahí fue suficiente y concluir, o no... ¿Y de qué depende?
De lo que cada uno pueda querer...
Entonces... ¿Se empieza una terapia sin poder saber cuándo va a terminar? A esa pregunta podemos contestarle con otra: ¿Cómo se podría determinar previamente lo que alguien pueda querer?
Otra vez, alguien con ansiedad puede sentir que esto es casi un juego de palabras y que están queriendo embrollarlo para convencerlo. Se resiste y dice: todo muy lógico, pero yo quiero saber si consulto por esto en cuanto tiempo me voy a curar o lo voy a saber manejar. Si le respondemos que no se puede saber y que no sea tan ansioso sería casi como expulsarlo y si le damos una respuesta concreta sobre cuanto tiempo seria mentirle, con este callejon nos damos cuenta de que quizá sea necesario, para poder tratar el tema por el que viene a consultar, incluir de alguna manera el asunto de la ansiedad que no le permite soportar el tiempo. Entonces, a su pregunta de "¿cuánto tiempo?" le podemos responder, por ejemplo, que va a depender:
De lo que cada uno pueda querer...
Sigue sintiendo cierta incomodidad, ya que no es la respuesta que espera. Quiere que le digamos, una semana, un mes, tres meses... hasta nos lo dice con un ejemplo: Cuando yo llevo el auto al taller y le pregunto al mecánico cuánto tiempo va a llevar repararlo si me contesta: "y no sé", me doy media vuelta y busco a otro que me diga la fecha en que me lo va a entregar, ¿usted no haría lo mismo?.
Vemos que tiene cierta lógica lo que plantea, pero si se pudiera homologar un automóvil con la psiquis, para cuestionar esto le podemos preguntar: ¿usted cree que un automóvil puede querer?
Porque de lo que se trata en todo tratamiento es de:
que cada uno pueda querer...
Y nos damos cuenta de que en la respuesta anterior que se repetía había en juego otro asunto. No se trata solamente de lo que cada uno pueda querer, sino también de que:
pueda querer...
Freud definía la salud mental como la capacidad de amar y trabajar. Entonces, en esa respuesta que dábamos, estaba en juego no solo lo que cada uno pueda querer tratar, sino que también está en juego una orientación del tratamiento: que pueda querer, amar, desear...
Desde la experiencia que tenemos como Psicólogos Argentinos y con lo que Freud nos orienta, nos encontramos que en los padecimientos que llevan a consultar hay también en juego una dificultad con los asuntos del amor y que Freud llama la capacidad de amar. Tomando nuestro dibujo del ovillo enredado, podemos jugar con eso y decir los enredos del amor.
En un tratamiento está en juego lo que cada uno pueda querer tratar, pero también que pueda querer y que pueda querer... tratarse. Que alguien consulte no necesariamente implica que quiera tratarse. Querer curarse, como si se tratara de ajustar unas tuercas o reponer un tornillo faltante, no es igual a querer tratarse.
Querer curarse no es lo mismo que querer tratarse.
No se trata de que la psicóloga online o el psicólogo online le resuelva ese asunto como si se tratara de curarlo, sino que de lo que se trata en el "trabajo" de la terapia es:
que cada uno pueda querer trabajar en la terapia online en la generación de recursos propios para poder arreglárselas con los asuntos que lo hacían padecer.
Y eso lleva tiempo.
Y si sigue insistiendo la pregunta de cuánto tiempo, eso se lo podemos preguntar como ya hicimos en otro texto al conejo blanco de Alicia en el país de las maravillas:
"Alicia: ¿Cuánto tiempo es para siempre?
-Conejo blanco: A veces, solo un segundo.” Lewis Carroll
En este punto, les recomendamos dos textos de nuestro blog: Sobre la Ansiedad... ¿Qué se le pide al amor? y Alicia en el país del psicoanálisis.
Sabemos que al amor se le pide muchas veces el para siempre y nos encontramos con cierta relación entre el amor y el tiempo que "El Principito" nos lo ejemplifica de una manera encantadora:
Si vienes, por ejemplo, a las cuatro de la tarde, comenzaré a ser feliz desde las tres. Cuanto más avance la hora, más feliz me sentiré. A las cuatro me sentiré agitado e inquieto; ¡descubriré el precio de la felicidad! Pero si vienes a cualquier hora, nunca sabré a qué hora preparar mi corazón...
El principito también necesita saber la hora del encuentro.
Si seguimos al conejo blanco como lo hace Alicia cuando éste le muestra un reloj, quizá podamos tratar los enredos del amor y poder así encontrarse a tiempo con lo que cada uno "pueda" querer.
Redactado por los profesionales de Psicólogos Online Argentina